La contaminación del medio ambiente a ido creciendo cada año, y en la actualidad estamos sintiendo los estragos de toda la irresponsabilidad. El mar en algún tiempo tendrá más plástico que peces, la amazonía estará desierta y las guerras no serán por expansión territorial, será por agua.
Por Jeylen Mixan Portocarrero / jeylenmixanportocarrero7@gmail.com
Momentos donde el calor es insoportable, días de playa que terminan dañando la piel de muchas maneras, y mientras la conciencia sigue en estado neutro. Muestras de indignación a cada instancia, como si el sol se va a detener o como si escuchara. El ser humano es diferente de los demás seres, por desarrollar su capacidad de inteligencia, cualidad que no sabe aprovechar hasta la actualidad, porque sus acciones dicen lo contrario y recaen sobre él, porque dice un antiguo refrán “no escupas al cielo porque en la propia cara te va a caer”, este dicho hoy se ha puesto en funcionamiento.
La temperatura ha aumentado de manera inmediata, y se siente la diferencia del anterior verano, por eso muchas personas muestran preocupación por la fuerte radiación solar, que en veces supera los 30 grados centígrados. Esta es la realidad que el ser humano venía buscando desde hace décadas, con su falta de conciencia, cultura ambiental, responsabilidad y respeto al medio ambiente, ha logrado esta experiencia. Hoy en día los problemas ambientales están causando desastres naturales y cobrando vidas, pero aun así la ceguera humana sigue enchufado a la falta de conciencia, para este ser, el ambiente es poco importante, por esas razones tala los bosques, contamina los ríos de variadas formas y llena el mar de basura.
Estamos viviendo sobre un planeta que está en agonía, bajo una capa de ozono perforada y bajo los rayos del sol que no perdonan. Respiramos aire contaminado, bebemos agua combinada con sustancias peligrosas, caminamos sobre la basura de las calles y lidiamos a cada momento con el humo de los carros. Esta es la realidad más penosa, una verdad que muchos ocultan porque les parece poco interesante, lo que debería tener mayor importancia. Hoy se vive como reyes sin respetar al mar, los ríos, bosques, calles, el aire, y sin entender la conciencia ambiental. Así de simple, la pregunta que uno debe hacerse es, ¿Qué será del mañana?, la verdad que estamos siendo egoístas con las generaciones que vienen, y el ser humano se ha convertido o autoproclamado en gobernante de la tierra, sin tener las capacidades suficientes.
El ser humano no es consciente de sus actos, será tarde cuando se de cuenta y los lamentos no le servirán en nada.
Hoy como la temperatura se eleva, no podemos reclamarle al presidente porque eso no le compete, pero si nos quejamos cuando no tenemos agua un día, cuando lo correcto sería tomar conciencia, hacerse una autoevaluación y reflexionar, pero siempre solamente reclamamos, cuando el error está en nosotros. La bomba de tiempo se activa, el planeta se desestabiliza, ciudades que se quedan sin agua, las cuales muy pronto podrían desaparecer, pero eso no ha sido suficiente para tratar de entender y ser conscientes de nuestros actos. El ser humano no ha sembrado nada productivo ambientalmente, esta cosecha es el ejemplo y la prueba de ello.
Somos seres violentos contra los animales, vivimos distanciados los unos de los otros, y la soberbia ha sobrepasado sus niveles, generando efectos negativos. Nos encantan los platos marinos, comer pescado en el almuerzo o en el Perú un ceviche en las costas, disfrutamos de los atardeceres, los días de playa, pero no cuidamos el mar, porque actuamos de manera empoderada y dejamos la basura en las playas, que luego irán al mar para permanecer 200, 300, 400 años a más. Muchos animales marinos morirán atorados, asfixiados o intoxicados por tú bolsa, botella o lata que dejaste tirado, así es como se muestra inteligencia ¿Cuándo cambiamos? Es hoy es nunca.
La naturaleza no nos necesita, solamente quiere que la cuidemos, pero la humanidad necesita de ella para seguir sobreviviendo.
Enseña a tus hijos a valorar el medio ambiente, el mar, los árboles, y comparte con las personas, una cultura ambiental, para cada día poder mejorar y las toneladas de basura sean menos cada vez. Respetemos al planeta, no lo destruyamos, es nuestro y hay que cuidarlo, si no lo hacemos nosotros, no lo hará nadie más.
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